Descripción
Desde tiempos remotos los japoneses han percibido su realidad como el lugar donde moran los kami, divinidades de la naturaleza, como las montañas, los ríos o los árboles, o espíritus de la tierra o de las profesiones, de los héroes o de los ancestros. A esta visión, heredada del sintoísmo, la religión autóctona de Japón, se han ido superponiendo armónicamente nuevas ideas provenientes de las tradiciones chinas e hindúes, e incluso Occidentales, que han ido configurando el particular imaginario japonés, un universo insólito habitado por seres fantásticos únicos. El presente libro analiza la presencia y la evolución de los seres fantásticos a lo largo de diferentes periodos literarios: Nara, Heian, Kamakura y Edo.